domingo, 6 de julio de 2008

EL EGEO (8)

Queridos amig@s y mailto:amig@marine@s,
nos encontramos en la isla de Lesbos, fondeados en la Bahía de Kalloni, que parece una balsa de aceite, estamos acabando de desayunar, arriaremos la zódiac y a inspecionar los alrededores.
Os envío las singladuras de los días 4 y 5, así como la crónica del gaiteiro del Bierzo.
Perdonar mi redacción pero es lo que hay. Estoy convenciendo por las buenas al segundo, persona culta y preparada para que se encargue de las singladuras y si no lo consigo por las buenas, tendré que sacar a relucir el látigo de las siete colas.

Besos y abrazos

El Capi y tripu.

5 de julio
Desayunando Javier y yo, y después de consultar el libro de las islas griegas, decidimos zarpar pues en Khíos no vimos nada que nos llamase la atención para quedarnos un día recorriendo la isla. Esperamos que se levantara Manuel, le comentamos el plan y estando todos de acuerdo decidimos zarpar.


Compras de alimentación del día y regreso de Javier con la compra y sorpresa el periódico el “Pais”.Según éste, España ya no va tan bién.A ver qué hacéis en nuestra ausencia.

Como ayer llegamos de noche y hoy nos vamos pronto, nos libramos del papeleo, así que soltamos amarras, levamos cadena y rumbo a Lesbos, con la inquietud de que nos secuestren las “Lesbianas”.

Seguimos con viento de proa, y nos preparamos para pasar otro día ciñendo. Viento de 15 a 18 n. que nos genera un aparente de 21 a 25. Colocamos burdas y navegamos hacia la costa turca con Génova, trinqueta y mayor, dejando la isla de Oinousses por babor, que es la principal y a continuación las islas de Vatos y Pasas, seguimos navegando por el estrecho de Egriliman y damos el bordo en Ucadalar (Tukía). Templamos las velas y por delante un bordo ciñendo de 42 M. al 311º. Escora considerable, pero esto no acojona al segundo que se pone manos a la obra a hacer un pollo al horno. A la hora de comer Manuel prepara un puré de patata de sobre y chicos, chicos, a comerrrrrrrrrrrrr. Todo soberbio (comentario de Alex cada vez que se sentaba a la mesa) Llegamos al la entrada de la Bahía de Kalloni, que es un saco que tiene 12 millas, de longitud por 6 de anchura, a las 19,30 h. y enfilamos en estrecho de entrada, dejando el islote Irak Kalloni por babor, el paso es angosto por su calado, pero bien señalizado con faros y una enfilación. Navegamos 5 M. y echamos el ancla frente al pueblo de Synemaneli, ya de noche y una profundidad de 8 metros. Cena, con las sobras del pollo Javi nos hizo un arroz no menos soberbio que el pollo. La noche preciosa, el barco parece varado, no se mueve nada. Para que os hagáis una idea de cómo es la gente griega de atenta, cuando llevábamos fondeados 15 minutos se nos hacerco un señor mayor con una lanchita de pesca, por si queríamos desembarcar. Le dimos las gracias y le dijimos que lo haríamos mañana y que no se preocupara que lo haríamos en la zódiac. A continuación un poco de guitarra y a dormir.


skala kalloni midnight



EL EGEO (7)

Singladura 2/6

Sobre las 8 salgo del camarote y ya veo a Javier en la bañera desayunando, hago lo mismo. Manuel duerme o sea que embarcamos en la zódiac y salimos de excursión a recorrer la costa que no vimos ayer. A la vuelta ya estaba en pie con baño incluido, izamos la zódiac, levamos el ancla y a navegar.

Damos rumbo a Pithagoríun, que está en el sur-este de Samos y a dos millas de la costa Turca.

Fondeamos para darnos un baño y comer. Arroz de erizo (sobras de ayer) y fréjoles con patatas, huevos cocidos y chorizo.

Ancla arriba y damos rumbo a la ciudad de Samos, navegando entre aguas Turcas y Griegas, las últimas 7 m. ciñendo a rabiar con vientos de 25 n. y en 3 bordos entramos en la bahía de Samos, amarramos en el muelle y al tener mal resguardo el barco se mueve bastante, le ponemos mas defensas de las habituales y dos largos, dos traveses y dos sprigs .

Papeleo en la autoridad, preguntas de el último puerto, si pensábamos ir a Turquía, el próximo destino etc., Nos hacen fotocopia de los pasaportes, del seguro, de la documentación del barco, revisan todo con lupa, se dan cuenta que tengo el título de capitán caducado en Mayo, menos mal que la verborrea del segundo y que tengo el justificante de la renovación todo queda ahí. Ya nos habían advertido que navegando en las proximidades de estos dos países tanto en Grecia como en Turquía nos iban hacer mas preguntas de las habituales.

3 de julio

Decidimos pasar el día en Samos, alquilar un coche y recorrer los interiores de la isla.

Javier vuelve a la oficina de las autoridades para rellenar el papeleo que no se hizo ayer porque tenían los impresos en un cajón y no tenía la llave. Hace las compras del día, pan, agua etc. y partimos en busca del alquiler del vehículo.

Partimos desde Samos por el norte hacia el Oeste, conociendo playas y pueblos la mayoría con turistas. Lo que mas no llamó la atención de la isla es la orografía, tiene montañas muy altas y escarpadas y unas gargantas muy profundas. La isla es rica en agua, con varios manantiales y algún río pequeño, que también tiene su pequeña cascada. Para llegar a ella, hay que andar un buen rato, por un paraje muy bonito, cerrado totalmente de vegetación y árboles que no dejaban entrar el sol, nos recordaba a los parajes de Galicia. La isla es muy verde con varios bosques de árboles. Casi en el extremo Oeste de la isla, nos metimos hacia el interior dirección sur-este. Nos detuvimos unas horas en Pythagorion y para Samos de nuevo.

4 de julio

A primera hora hicimos la compra, pagamos el puerto y devolvimos el coche.

Rumbo a Khíos que como no podía ser de otra manera viento de proa, proa. Salimos de la bahía de Samos a motor y dimos un bordo largo a Turkía, al estar en las inmediaciones de la costa otro bordo y subimos por la costa turca hasta dar el tercer bordo que nos llevó a Khíos. Viento como es el griego, cambia de grados y de intensidad frecuentemente.

Distancia 60 m. que nos llevaron aproximadamente 9h.

Atraque de popa, vuelta por el pueblo y copa en un local de música en vivo.