jueves, 3 de julio de 2008

EL EGEO (6)

Buenas noches mariner@s, estamos en la isla de Samos, en el pueblo de Samos, son las 24 horas y ya veis el cariño que os tengo que ha estas horas me acuerdo de vosotros para que os llegue la crónica del día 1.
Besos y abrazos
El Capi y tripu.


1 de julio
El tiempo vuela, comenzamos un nuevo mes, hace dos que estamos navegando y parece que hace solamente una semana, el 1 de mayo que partimos de nuestra querida Galicia.

Hoy fue al revés pues no pusimos despertador y llegó el ferry, eso quiere decir que el Meltemi pasó, nos levantamos a la pu… carrera, desenganchamos luz y agua dejando todo en el puerto si recoger, soltamos amarras y maniobra. Amarramos próximo a donde estábamos pero por fuera del puerto, con el consiguiente bamboleo.
Recogida del cable eléctrico y manguera del agua, buscar al marinero para pagarle, compra de pan y zarpamos.
Ponemos rumbo a la isla de Foúrnoi, viento del través entre 18 y 33 n. lo que nos hace navegar a buena velocidad jugando con la superficie vélica debido a la inestabilidad del viento.
Dejamos la isla de Trakhíli por babor y nos acercamos a Foúrnoi para conocer dos calas que tiene en la zona sur, Kaurni, muy bonita con playa y árboles en la misma con lo cual no hay problema de sombra y un pequeño, muy pequeño pueblo marinero. A continuación visitamos la otra cala Mápuapo y pusimos rumbo por el estrecho que queda entre las dos islas al pueblo de Foúrnoi. Reconocimiento desde el barco y dimos rumbo a la isla de Samos.
Cuando estábamos entre las dos islas el segundo avistó algo extraño por estribor, al irnos acercando el objeto extraño se convirtió en un submarino, que navegaba semisurmergido llevando en superficie solamente la torreta del periscopio.
Hoy por la mañana al poner el motor en marcha durante la maniobra, sonó la alarma de presión de aceite y seguía sonando a intervalos, con el consiguiente susto pues podía agarrarse el motor y acabar con las vacaciones o por lo menos con parte de ellas. Hicimos la singladura a vela y decidimos recalar y ponernos manos a la obra para detectar la avería que podría ser la bomba de aceite, aunque sería una avería muy poco frecuente.
En el sur-oeste de Samos encontramos una preciosa bahía, echamos el ancla y manos a la obra. Lo primero desmontamos el presostato de aceite, tarea difícil por donde esta situado, le tocó a Manuel pues a demás de tener los brazos largos es zurdo y había que manejar la 15 fija con la izquierda, lo comprobamos y parecía correcto. A continuación con un manómetro de baja, la manguera y un racor de los frigoríficos, medimos la presión de aceite de la bomba siendo la correcta en todas las revoluciones. Respiramos tranquilos. Vuelta al presostato y haciendo nuevas pruebas detectamos que la avería estaba ahí.
Vuelta en zódiac por la costa inmediata y cena en un restaurante de la playa, invitación del segundo y a dormir.