DIARIO DE A BORDO. Primera etapa. Portonovo-Menorca.

De Portonovo . . . al Mar Egeo.

Llevo unos días resistiéndome a escribir sobre esta travesía, pero como nadie lo hace y además insisten en que lo tengo que hacer, no queda más remedio que empezar aunque sea con retraso.
Hoy día diez de Mayo llegamos a Ibiza que es el termino del primer objetivo que nos habíamos marcado “ Llegar a las Baleares “
Atrás quedan los proyectos hechos en Portonovo para embarcarnos el día 1 de Mayo en esta aventura con rumbo al Mar Egeo.
En un principio los que íbamos a realizarla éramos 4 :

Roberto.- Patrón y armador del Odysseas un Atlantic 61, precioso velero que se va a encargar de llevarnos por esos mares hasta Grecia.

Javier,- Es el Segundo, jefe de marinería y cocina. No le gusta que le lleven la contraria y no seremos nosotros los que nos atrevamos a hacerlo.

Manolo.- Es el mas joven del grupo, un funcionario con ganas de aventuras marineras, de querer aprenderlo todo incluso la guitarra, un buen compañero.

José Antonio.- Este soy yo, y aun no sé como me embarqué ( nunca mejor dicho) en esta aventura, dejando mi velero Martana solo.
Dentro de mis funciones esta la de tesorero y redactor de abordo.

Quince días antes de la partida se enrolan Pepe Cruz y Alex; un buen cocinero, manitas y un buen informático, por ese orden. El mismo día de la partida sube a bordo Alberto.

Salimos de Portonovo a las 11 de la mañana del día 1 de Mayo tal como estaba previsto, llueve y tenemos el viento en contra, pero esperamos que la situación mejore cuando salgamos de la Ría de Pontevedra y nos pongamos a rumbo. Craso error el viento es del Sur y el mar del W.
El barco es una coctelera y empieza la toma de chicles para el mareo.
Javier nos prepara la primera meridiana de la muchas que vamos a tomar en esta singladura, vermut rojo de garrafa, aceitunas verdes y negras, jamón y chorizo. La comida, langostinos cocidos y carne a la piedra.
Seguimos navegando a motor y con las mismas condiciones de tiempo.
El patrón dice que nos organicemos para hacer las guardias de la noche, me toca de hacer la segunda, 2 horas.

El día 2 viento menos intenso pero sigue siendo del Sur y el mar mas calmado, el motor sigue con su ronroneo y con la mayor desplegada nos esta llevando a cinco nudos . La cocina nos obsequia con los consabidos langostinos y unas fabes con rape, todo esto regado con un buen rioja.
Antes de comer el generador se apaga, el motivo : manguito de agua roto, se decide entrar en Peniche para tratar de repararlo. Se nos fastidia la excursión a las Berlengas. Cenamos en el barco y en puerto.

Día 3.- Se consigue reparar el generador con una muy buena adaptación, aprovechamos para cargar agua y combustible, salimos de Peniche rumbo a San Vicente, con viento del SW nos permite navegar a vela durante unas cuantas horas, seguimos durante la noche, cae el viento seguimos a motor, nieblina.

Día 4 .- El patrón después de la comida preparada por Pepe, Zapata en caldeirada muy rica y abundante, menos para Roberto que es alérgico al bacalao, nos propone hacer una pequeña escala en Sagres y visitar sus cuevas, nos metemos en puerto, una vez amarrados tenemos que salir de allí para que el barco no se rompa por el mar existente. Fondeamos delante de las cuevas y tratamos de echar la zodiac al agua, Pepe siempre tan voluntarioso al tratar de poner el tapón se cae al agua entre las carcajadas de todos tenemos fotos. Lo recuperamos y seguimos rumbo a Gibraltar.

Día 5.- Soleado y con viento favorable aprovechamos para izar el genaker por primera vez, nos hacemos a la idea de tomar unos finos en Cádiz, pero al escuchar la “meteo" y ser la previsión para el día siete en el Estrecho de fuerte marejada y viento de levante fuerza 7, 8, decidimos cruzarlo antes de que llegue el temporal.
Cruzamos el Estrecho y a las 02 horas entramos en la bahía de Algeciras, noche oscura, bahía llena de petroleros que hay que sortear para dirigirnos al muelle Ingles mismo debajo del Peñón. Dormimos amarrados al muelle que tanto nos costo encontrar.

Día 6.- Por la mañana el panorama es distinto, las imágenes oscuras de los petroleros que se intuían por la noche ahora son claras y se puede apreciar las inmensas moles que nos rodean (parece como que los regalasen, dice uno), cargamos gas oil a tope incluso alguna garrafa, pues es mas barato y hay que aprovechar, hacemos las compras de supermercado pan y fruta, pagamos el amarre y salimos de Gibraltar.
Un aviso para los que pasen por aquí : navegar por el canal para hacer combustible, de no hacerlo hay riesgo de tocar fondo.
Otra vez la "meteo" nos dice que el aviso de temporal sigue vigente : vientos de Levante fuerza 7,8, y fuerte marejada. Ponemos rumbo a Malaga y por el camino optamos por hacer noche en Benalmadena, a la que llegamos sobre las 8 de la tarde, atracando en el muelle de la Capitanía. Después de asearnos y ponernos guapos, salimos a dar una vuelta por el puerto y cenar fuera del barco. Es la despedida de dos buenos amigos que nos acompañaron desde la salida de Portonovo Alex y Pepe, Alberto ya se bajó antes.